La prohibición del botellón llega a la Comisión de Movilidad

Jaime Galán
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Esta práctica lleva prohibida en la ciudad desde julio de 2020 por motivos sanitarios y ahora está entre los puntos del día en la cita de mañana. La Ordenanza anterior limitaba el consumo fuera del Casco histórico

Botellón en el recinto ferial de La Peraleda. - Foto: David Pérez

El consumo de alcohol en la vía pública vuelve a entrar en escena. El concepto conocido como botellón, ya sea individual o masivo, lleva prohibido en todo el término municipal desde julio de 2020, cuando el Ayuntamiento aprobó un decreto para evitar reuniones sociales que estaba amparado en la evolución epidemiológica de la crisis sanitaria de la Covid-19. Ahora, dos años y dos meses después, el equipo de Gobierno ha puesto entre el orden del día de la próxima Comisión de Movilidad, la suspensión de esta prohibición.

Si finalmente el levantamiento de esta medida se lleva a cabo mañana, lo normal sería volver a la regulación anterior en este sentido. Y esta lo que prohibía es el consumo de alcohol dentro de la muralla. Es decir, que solo estaría prohibido en el Casco Histórico su consumo. De ahí los famosos botellones en el paseo de Recaredo de hace ya unos años, justo en el límite de la misma. Estos podrían recuperarse.

Sin embargo, habrá que ver como responden el resto de los grupo políticos, porque el equipo de Gobierno ya planteó la suspensión de esta prohibición en noviembre de 2021, pero se encontró la oposición de todos al estar en plena subida de los contagios y en el escenario previo a la séptima ola del coronavirus en nuestra ciudad y en el resto del país.

En cualquier caso, esta prohibición ha estado cogida por alfileres a lo largo de estos meses, ya que en determinadas fiestas populares de la ciudad como la Romería del Valle, las migas de los días 24 y 31 de diciembre o la ITI -la tradicional fiesta de los alumnos de Ingeniería Técnica Industrial- se ha permitido este consumo de alcohol en la calle, ya sea por dificultades en el dispositivo de seguridad o porque se haya hecho la vista gorda. De igual manera, en el recinto ferial de La Peraleda, punto donde es habitual hacer botellones masivos en el período estival, durante estos últimos meses sí es cierto que se han evitado los macrobotellones, pero sí que se producían pequeñas reuniones en las que se estaba incumpliendo la normativa.

Hasta que este decreto quede oficialmente levantado, si es que ocurre definitivamente mañana, beber en la vía pública sin estar permitido puede acarrear sanciones de entre 60 y 600 euros a los consumidores, tal y como indica la ordenanza antibotellón.