La vida de los pueblos se palpa en los colegios. Las Vegas de San Antonio, una pedanía de La Pueblanueva, ha logrado sobrevivir a la despoblación y disfruta de un éxito inesperado. Unos 20 alumnos asisten diariamente a las clases, pertenecientes al CRA 'Entrerríos'. La mitad de los estudiantes proceden de fuera: de La Pueblanueva y de Talavera.
«Por el boca a boca», apunta el presidente de la junta de la pedanía, Marcos Delgado, como desencadenante de un éxito nacido de la buena fama de la escuela de Las Vegas de San Antonio. Este predicamento empezó hace apenas seis años. El CRA 'Entrerríos' engloba a las secciones de Los Cerralbos, Lucillos, Montearagón y Las Vegas de San Antonio. Y ha alcanzado notoriedad en prensa en los últimos años por méritos como el premio 'Acción Magistral' con el que BBVA y la Fundación de Ayuda contra la Drogadicción (FAD) premió en 2019 los proyectos que proponen un nuevo método de reducción y gestión de los residuos que se generan en el centro escolar. «Es una ecoescuela», presume el alcalde por la labor desempeñada en la sección para que los alumnos creen su propio compost.
Hace unos días, el CRA 'Entrerríos', junto con el CEIP 'Azorín' y el IESO 'Publio López Mondéjar', han sido seleccionados como ganadores de CLM en la 38 edición del Concurso Escolar del Grupo Social ONCE, que propuso a los docentes y estudiantes a presentar trabajos por la inclusión y la igualdad dentro de su entorno más cercano en los ámbitos del ocio, la educación, el empleo o la accesibilidad universal. Así, participaron 7.241 escolares de 115 centros educativos regionales, con la coordinación de 164 profesores. Por tercer año consecutivo, gana el concurso.
Marcos destaca también la colaboración del Ayuntamiento con el colegio. Por ejemplo, mediante el Plan Corresponsables promovido por la Junta. Además, ofrece clases de kárate y ocio en la pista deportiva de Las Vegas de San Antonio, por lo que los niños pasan buena parte del día en esta población.
«La seña de identidad es el ambiente familiar que tenemos. Hace que haya relaciones muy fluidas con las familias, que participen en muchas de las actividades que hacemos», comenta la directora, Mercedes Jiménez, quien detalla que las aulas son mixtas, con alumnos de diferentes cursos en la misma clase. «Cada uno aprende lo que necesite en ese momento», señala y apostilla que la atención a la diversidad es cotidiano y habitual.
«Procuran enseñarse entre ellos, entenderse y comprenderse. Trabajamos las emociones de forma habitual y estamos acostumbrados a hablar, a escucharlos y forman parte de las tomas de decisiones. Tres veces a la semana hacemos asambleas con actividades de escuchar, de expresión, de filosofar y debatir», resume.
Mercedes subraya la educación ambiental, con la gestión de un huerto y propuestas de reciclaje. «Traen almuerzos sin residuos. Tienen sus táperes y botellas rellenables y procuramos que sea saludable y no genere residuos», apunta.