El turno de réplica de La Recua Teatro

J.M.
-

La compañía de La Puebla de Montalbán defiende tras el comunicado de la Concejalía de Cultura la labor desempeñada hasta 2020 y criticala pérdida de peso de los pueblanos en la programación

El turno de réplica de La Recua Teatro

La compañía La Recua Teatro asegura que ha roto tres años de silencio asumidos para no entorpecer el desarrollo del Festival Celestina y ha replicado en un comunicado y palabras a este diario el balance publicado por la Concejalía de Cultura del Ayuntamiento de La Puebla de Montalbán sobre las últimas ediciones del Festival Celestina. Concretamente, entre 2019 y 2022, que supuso el cambio en la dirección de esta Fiesta de Interés Turístico Regional. Las impresiones del grupo, dirigidas a la concejala de Cultura, distan sobremanera de la opinión del comunicado municipal, que abofeteaba al grupo.

La Recua Teatro aclara que nunca han ejercido como organizadores del 'Festival Celestina' sino que esa función la había asumido siempre el Ayuntamiento. Y señala que se encargaban de la dirección artística y la coordinación general. Hasta el año 2020 en que fueron sustituidos en la coordinación. El grupo, señala, presentó un proyecto de programación como directores artísticos, pero se frustró. Y, desde entonces, hay una desvinculación.

La compañía se pregunta el porqué de que «decenas y decenas» de pueblanos que colaboraban en el festival hayan desaparecido de la programación. «Antes nuestro gran dolor de cabeza era lograr que entraran tantos nombres de actores pueblanos en el programa de mano impreso; ahora, sin ningún pudor, a los escasos participantes se les menciona como 'gentes de La Puebla'», critican.

En este sentido, La Recua Teatro atribuye la pertenencia del festival «a quienes lo han creado, hecho crecer, defendido, sufrido y convertido en referencia cultural», en referencia a los pueblanos. «Solo fue posible con muchas horas dedicadas a su formación, ensayos y cercanía humana», resalta. Y, sin dar nombres, censuran a las personas que «se han dedicado a desvalorizar el trabajo de los demás o poner palos en las ruedas, ni a los que lo acaparan para arrimar el ascua a su sardina y utilizarlo en provecho propio».

Sobre la falta de organización en el año 2019 mencionada por la Concejalía de Cultura, La Recua Teatro la atribuye a las elecciones municipales de mayo. «En cuanto hubo gobierno entrante, nos pusimos a trabajar y sacamos adelante un festival en tiempo récord y con calidad», responden.

La compañía deja claro que la organización, producción e imagen son responsabilidad del Ayuntamiento. Y que la página de internet es propiedad municipal.

La Recua Teatro incide en el sobreesfuerzo durante las ediciones bajo su dirección por vigilar los equipos durante las madrugadas por lo limitado del presupuesto o la disposición de casas de amigos para albergar a los actores del equipo para ajustarse al dinero reservado por el Consistorio pueblano.

«Jamás en 20 años, hemos determinado unilateralmente el presupuesto ni decidido la programación. Era algo consensuado, según las circunstancias. Nosotros hacíamos propuestas de programación y debían ser analizadas y aprobadas por el Ayuntamiento», explican. Y apostillan: «A lo largo de 20 años y diferentes equipos de Gobierno, siempre habíamos logrado un entendimiento cordial, que, con respeto, superaba cualquier diferencia de enfoque, trabajando siempre con sentido de equipo entre los concejales y nuestro criterio artístico».

Además, La Recua Teatro quiere evidenciar que no ambicionaba una gestión plena del festival sino que reclamaba descarga de ciertas responsabilidades. Y presume de que, durante 18 ediciones, ha regalado el derecho de autor al ayuntamiento.

El grupo reprocha la afirmación de la concejala de que está perdida la posible declaración de Interés Turístico Nacional. «Cómo alguien que debe defender el festival insiste en dar esa imagen catastrófica de un proyecto que llegó a sus manos lleno de vida y prestigio», aseveran al respecto.

Por último, la compañia teatral cuestiona el éxito de la edición de 2022 que pregona la Concejalía de Cultura. «Que explique cómo con 90.000 euros de presupuesto hacen cuatro días y medio cuando los demás, con la mitad, programábamos 14 días, sin entrar en temas de calidad, sonorización o respuesta de público», se preguntan.