El proyecto para poner en marcha 2,4 millones de metros cuadrados de suelo industrial al este de Talavera acaba de dar un nuevo paso en su consolidación y puesta en marcha. El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha anunciado hoy la aprobación por parte del Consejo de Gobierno de la declaración de Interés Regional del Plan de Singular Interés Transporte & Tecnología (T&T), que impulsará la creación de casi 2,5 millones de metros cuadrados en un nuevo área industrial «mirando a Madrid».
García-Page lo ha anunciado en Pepino en la presentación regional de los nuevos modelos de camiones Renault Trucks e-Tech 100 por cien eléctricos del Grupo Talauto, en el que ha participado junto a la alcaldesa, Tita García Élez, el presidente de la Diputación, Álvaro Gutiérrez, y el director general de Renault Trucks España, François Bottinelli, quienes han acompañado a José Manuel y Nilo González Perales, gerentes del grupo empresarial.
El nuevo proyecto industrial desarrollará más de 2,5 millones de metros cuadrados de suelo industrial en Talavera, en una zona situada en el entorno del kilómetro 100 de la A-5, contará con una inversión público-privada de 550 millones de euros y la creación de unos 3.500 puestos de trabajo. Con ello, se establece una zona estratégica de actividad logística y de desarrollo en la ciudad para la llegada de empresas al otro lado del polígono industrial de Torrehierro, el área mas importante hasta ahora de la ciudad, pero no en las mejores condiciones cuando se decidió apostar por ello. «Se decidió plantear el suelo mal y alejado de la ciudad, en una zona que no tenía ni autovía, que llegó mucho más tarde», recordó el presidente, quien aseguró que con este plan «eso lo vamos a corregir de una manera inmediata».
Así, Talavera será clave para el futuro desarrollo que se implantará alrededor de la A-5 y con ella, las empresas que apuesten por esta ubicación. En este sentido, el presidente del Ejecutivo regional recordó que «España debe mirar al Atlántico, después de hacerlo durante tanto tiempo al Mediterráneo» y potenciar el espacio entre Madrid y Lisboa, las dos capitales de la Península Ibérica.
Este nuevo área industrial supondrá el impacto más que positivo en la inversión, el empleo y el desarrollo económico de la comarca y la región, subrayando el éxito de las políticas autonómicas en la atracción de inversiones. No obstante, añadió, «la inversión extranjera se ha multiplicado casi por mil desde 2015».