El CD Villacañas no levanta cabeza. Ya son ocho partidos sin ganar. Al conjunto de Pedro Velasco se le hizo largo el partido y vio como se le fue por el desagüe una renta de dos goles después de los tantos conseguidos por Antonio Fernández y Chuliá en la primera parte. Las numerosas bajas del cuadro toledano terminaron haciendo mella ante un Villarrubia, con más fondo de armario, que apretó en la segunda parte y, en poco más de veinte minutos, igualó el partido. Ambos equipos terminaron firmando un empate que no dejó contento a ninguno de los contendientes.
El conjunto villacañero arrancó el partido sometido por el buen inicio de su rival. Cedió la posesión y esperó su oportunidad. El primer tiro fue para el Villarrubia tras una pérdida de Manzano en la salida. El balón cayó en los pies de un Vera que no se lo pensó y sacó un remate que se fue por encima del larguero. A pesar del dominio del equipo blanquiazul, el cuadro de Pedro Velasco estaba bien colocado en el campo y no sufría en exceso a la espera de que llegara su momento.
Y lo hizo en el minuto 17. Carlos Díaz filtró un balón a la espalda de la defensa local. Antonio Fernández se quedó solo ante el portero y definió con un derechazo fuerte, abajo y cruzado, para poner por delante a su equipo. Con el gol en contra, el conjunto de Miguel Aroca pecó de ser algo ansioso y fruto de esa precipitación por no perder tiempo e ir a por el empate llegó el segundo tanto del Villacañas. Se originó en un error grave de Álex Díez en la salida de balón, Chuliá se terminó haciendo con el cuero dentro del área y no perdonó. Batió a Diarra con una buena definición.
El equipo toledano arrancó el segundo acto con la inercia positiva de lo logrado en la primera parte y estuvo a punto de conseguir el tercer gol. Dispuso de dos ocasiones para ello. La primera en un centro de Curro que enganchó de primeras Antonio Fernández y tuvo que despejar a córner Diarra. Unos minutos después se intercambiaron los papeles y tras una gran jugada del delantero de Manzanares por la banda derecha quién perdonó fue Curro al rematar con el interior por encima del larguero.
Sin embargo, en una jugada aislada, el equipo local recortó diferencias. El 1-2 llegó en un balón repelido hacia el segundo palo y allí, con todo el tiempo del mundo, David Barca bajó la pelota con el pecho y soltó una gran volea que fusiló a Javi López. Con el estímulo del tanto el Villarrubia tensó el encuentro y apretó. De nuevo en una jugada algo alborotada tuvo que salvar bajo el larguero Bruno el empate. Fue un preludio de lo que estaba por llegar. En un córner, el esférico fue despejado a los pies de un Javi Feria que no se lo pensó. Su zurdazo desde más de 30 metros entró pegado al palo derecho y sorprendió a Javi López.
Tras el empate, el cuadro local no pudo encontrar el gol del triunfo y en el tramo final del encuentro perdió algo de fuelle. El conjunto de Velasco pudo respirar y estuvo a punto de llevarse el partido. Tuvo la ocasión del 2-3 Antonio Fernández. Se inventó una gran vaselina que salvó Diarra con las yemas de los dedos. El partido finalizó con un empate que supo a poco a ambos equipos.