Los vecinos de Palomarejos mostraron ayer su preocupación por los designios de los terrenos que durante los últimos 60 años han acogido el Hospital Virgen de la Salud, así como los terrenos que actualmente ocupa el cuartel de l a Guardia Civil.
El nuevo Hospital Universitario ya funciona a pleno rendimiento, ya que en el antiguo solamente quedan algunos servicios que el Sescam irá trasladando de forma paulatina. Será entonces cuando se produzca su devolución definitiva a la Tesorería General de la Seguridad Social. En ese momento, según se plantea, el Ayuntamiento solicitará los terrenos. Por el contrario, con la parcela del actual cuartel habría que realizar una permuta en la que el Ayuntamiento y el Ministerio ya están trabajando. Es decir, la problemática con ambos solares es diferente.
Sea como fuere, dos de los espacios que han dado vida al barrio van a buscar ubicaciones lejos de él, lo que provoca el malestar de los vecinos ante la tesitura de un barrio que se ha quedado «obsoleto».
Desde el Ayuntamiento se insiste en la construcción de viviendas destinadas a «gente joven», tal y como indicaba el concejal y presidente del Consejo de Participación del Distrito Centro, Juan José Pérez del Pino.
Ante ello, se encontró con la incredulidad de los vocales del resto de grupos políticos presentes en la asamblea, que aseguraban no comprender el hecho de que esta semana no se hubiera convocado Comisión de Urbanismo preceptiva antes del pleno de este jueves, ya que en principio «no había asuntos que tratar» y se está ideando un Plan de Urbanismo para el barrio. Así lo manifestó el portavoz del PP, Juan José Alcalde, que pedía «responsabilidad» recordando que se trataba de un edificio, el hospital, «con fecha de caducidad y debería tenerse ya una alternativa»; o el de IU, Txema Fernández que argumentaba que «se trata del barrio con más promesas de la ciudad, y muchas incumplidas». En la misma línea se pronunciaba la edil de Ciudadanos Araceli de la Calle, que terminó reclamando una Comisión de Urbanismo de la que no tendrán noticias «hasta que no pase el pleno». María Ángeles Ramos, concejala de VOX, reprochó la propuesta del equipo de Gobierno, argumentando de que se trata solamente de «parches que no dan solución al conjunto del problema».
La otra de las grandes preocupaciones del colectivo vecinal es qué pasará con el control del estacionamiento regulado (ORA), ante lo que Pérez del Pino pidió «clarificar el objetivo» y posteriormente «estudiarlo».
Del mismo modo, los vecinos plantearon su malestar por la no atención de su demanda de fiestas en el Distrito Centro, algo que «estaba aprobado en el último Consejo y que no se contempla en los presupuestos», dijo la representante vecinal, ante lo que Pérez del Pino, sentenció que «el equipo de Gobierno no se plantea fiestas en ningún distrito». Además la ausencia del repintado de las líneas de juego y redes en las porterías de la pista deportiva de la calle Santander fueron motivo de reivindicación, a lo que fueron respondidos que «se pintarán cuando la pandemia permita su uso». El «abandono» del Parque de las Tres Culturas, también fue llevado a la asamblea, ante lo que la concejal de Parques y Jardines, Marta Medina, aseguró que «está previsto», pero adujo «tener prioridades» para justificar que se irá realizando progresivamente, así como el plan de arbolado de las calles del barrio.
ORA en Palomarejos. Ante el traslado del Hospital y el futurible cambio de emplazamiento del Cuartel de la Guardia Civil, los vecinos piden la revisión del sistema de regulación de estacionamiento en el barrio.
Esta reivindicación subyace según las Asociación de Vecinos en el hecho de que las calles con estacionamiento regulado, están «vacías» dado que la afluencia de vehículos es mucho menor y la rotación no se hace tan necesaria.
Ante ello, presidente del Consejo de Participación del Distrito Centro, Juan José Pérez del Pino, se comprometió a convocar la Comisión de Movilidad en «15 días desde que se produzca la solicitud por parte de los vecinos» para lo cual, Pérez del Pino les apremió a «clarificar el objetivo que pretenden», puesto que en función de dicho objetivo, se habrán de tomar unas medidas u otras junto con técnicos, empresa concesionaria, Policía Local y el Consistorio. Ante lo que habrá que «ver la compatibilidad de las medidas con el contrato de la empresa que gestiona la ORA» tal y como matizó el portavoz del PP, Juan José Alcalde.