Hace pocos días se abrió un nuevo melón para debatir en el seno de un Consejo de Participación Ciudadana. Fue cuando el concejal de Movilidad, Juan José Pérez del Pino, planteó a los asistentes que el Ayuntamiento prevee llevar a la próxima comisión del ramo la reducción del espacio de las terrazas hosteleras a lo establecido en el año 2019, antes de la pandemia. Es necesario recordar que por la crisis sanitaria y las restricciones de aforo que sufrieron los locales de hostelería se ampliaron unos metros de terraza en los establecimientos en los que fue posible para poder cumplir con garantías la distancia de seguridad entre personas. Ante esta noticia, desde la asociación vecinal, Iniciativa Ciudadana, creen que no será suficiente en algunos casos, porque «no va a hacer desaparecer los problemas, sino volver a los que había antes de la pandemia», explica su portavoz, Hilario Alarcón.
A modo de solución, para contentar a todas las partes, desde Iniciativa Ciudadana proponen crear una ordenanza específica para regular las terrazas de los locales de hostelería. No es la primera vez que la asociación vecinal lo plantea, porque a su juicio, la normativa que actualmente las regula, la propia ordenanza de Movilidad, «lo incluye de una forma muy laxa y permite muchas interpretaciones», además de «favorecer a las empresas y al Ayuntamiento generando tasas, por delante de los vecinos», añade Alarcón.
El representante de Iniciativa Ciudadana insiste en que en ningún caso defiende que desaparezcan las terrazas, «sino que debe crearse un equilibrio entre los negocios y los vecinos, y que en caso de conflicto se resuelva en favor de estos últimos». Y es que, a su juicio, existen plazas en la ciudad en las que «el ancho de una calle está ocupada al 90 por ciento por un establecimiento, mientras que se reserva el 10 por ciento restante para tránsito y estancia del peatón». Hilario Alarcón menciona alguna de las calles que se ven afectadas por esta problemática, como por ejemplo la calle Sierpe, «donde se ve claramente lo que no se debe hacer, con una terraza extendida en un espacio muy reducido para el peatón», apunta. También plantea el caso de la plaza de San Vicente, «al ser un lugar soleado en el que la única zona sombreada por árboles está ocupada por una terraza de hostelería. Debería haber un reparto más justo entre vecinos y negocios».
Volver entonces a las medidas de 2019 respecto a estos espacios parece una buena actuación, pero Iniciativa Ciudadana anima al Consistorio a no quedarse ahí y dar un paso más «con una normativa que proteja al vecino». Los hosteleros, por el contrario, no han querido hacer declaraciones hasta que se conozcan más detalles sobre los cambios, pero algunos de los empresarios tanteados por La Tribuna comprenden que se vuelva a las medidas anteriores a la pandemia por cuestiones lógicas, pero recomiendan que no se aplique hasta el próximo año ya que han abonado las correspondientes tasas para las terrazas de esta temporada.