La Navidad le ha robado el alma. Ya no es el Bargas FS que había sorprendido hasta colocarse líder. Pero los de Dani Pérez consiguieron enderezarse para sacar los tres puntos frente a un CD Colegio San José que, probablemente, todavía a estas horas sigue dando vueltas a cómo se puede volver para Cáceres sin puntos.
El equipo extremeño supo exprimir el mal aspecto de los bargueños, con múltiples llegadas y ocasiones, pero la ineficacia le pasó otra factura en forma de derrota. Desde el inicio, no se pudo a ver a los locales nada cómodos. Es más, no encontraron la manera de enlazar dos pases seguidos o de romper la presión del rival con una jugada acertada.
La dinámica de la primera parte se puede resumir en constantes pérdidas de balón que provocaron contragolpes del equipo visitantes a las que respondió acertadamente Jorge, que salió de inicio en la portería. Pero, a decir verdad, el Bargas FS también dispuso de las suyas, menos claras e igual de desafortunadas.
Ni el paso de los minutos cambió la cara a los toledanos, que se toparon con la madera en un par de ocasiones. En ese intercambio de errores, el primero que lo acabó pagando fue el cuadro local. No le salía nada a Ruby, y tampoco un intento de sacar la pelota con el que el San José provocó un robo mortal. Rubén Mellado corrió un poco escorado a la derecha y su lanzamiento, duro y colocado, entró por toda la escuadra.
El 0-1 dejó aún más tocado al Bargas FS, aunque después de un par de minutos, se recuperó para igualar. En una de las pocas acciones de estrategia que le salieron, Mario Moñi recibió solo desde la esquina y su tiro entró en la portería después de tocar en los dos palos. Ese final de primer periodo sí que fue completamente bargueño, pero sin movimientos.
La segunda parte parecía que presentaba a otro Bargas FS, pero fue un espejismo. Fidel tuvo que sacar de paseo su catálogo de paradas. Salvó a los suyos con acciones de todo tipo. Con la mano, con el pie, en dos tiempos. Fundamental el talaverano, porque evitó una desventaja que hubiera sido insalvable.
Y cuando quedaban cinco minutos para finalizar, un error en el inicio del juego, permitió una recuperación local que Peces culminó después de una triangular perfecta. No estaba todo hecho, pero entre que el Colegio San José había cubierto el cupo de faltas y su moral estaba por los suelos por el trabajo no recompensado, Jona remató la faena a falta de tres minutos con un doble penalti. No tuvo más historia un encuentro mediocre para los de Dani Pérez pero que sostiene el liderato.