La Real Fundación de Toledo inició ayer la actividad de su nueva cámara web que nace con la vocación de ser el observatorio permanente del estado del Tajo.

La nueva cámara está conectada, permanentemente, las veinticuatro horas del día, todos los días del año, y es accesible a todo el mundo. De esta forma, con ese carácter de vigía eterno, pretende ser un humilde y sencillo, pero eficaz, observatorio permanente del estado del río Tajo en la ciudad de Toledo.

Enfocada hacia el icónico Puente de San Martín, emblema del logotipo de la Real Fundación, registrará el aspecto del maltratado río de manera constante para que cualquier habitante del planeta pueda ver en tiempo real el color de sus aguas, la presencia o ausencia de espumas y su caudal, estimado por la altura de la lámina de agua sobre referencias fijas, como son los sillares del propio puente, rocas de la orilla o el azud.

De este modo, la sede de Roca Tarpeya -histórico mirador sobre el Tajo del que se enamoró el escultor Victorio Macho hasta convertirlo en su casa y taller- será testigo del cumplimiento o incumplimiento de los caudales ecológicos del Tajo, de la recuperación o no de la calidad de sus aguas y -esperamos- del proceso de reintegración del río dentro de dinámicas naturales razonables como elemento esencial del paisaje cultural de Toledo.

Este proyecto cuenta con el patrocinio de la Fundación Soliss y es accesible en este enlace:  https://www.realfundaciontoledo.es/menu/proyectos/webcam-rio-tajo.html