Más de 4.000 participantes han disfrutado de una nueva edición de la mítica carrera nocturna de Toledo. La XV edición volvió a congregar a los toledanos a disfrutar de una carrera fetiche en la provincia. 

La nota negativa de la carrera fue la parada cardíaca sufrida por un joven corredor de 17 años, que al caer desvanecido se golpeó con fuerza con la cabeza en el paviemento. La rápida actuación de un médico y una enfermera que participaban como corredores en la prueba fueron vitales para salvarle la vida, al igual que la intervención de los voluntarios de Protección Civil, que acudieron provistos de un desfibrilador.

Los servicios médicos consiguieron sacar al joven de la parada tras veinte minutos de masajes cardíacos y tras ser estabilizado en la UVI móvil fue trasladado al hospital universitario de Toledo, donde continúa ingresado en la Unidad de Ciudados Intensivos.