Sobre las ocho de la mañana han saltado las alarmas en el Alcázar. La causa han sido las llamas producidas en la última planta del Museo del Ejército, previsiblemente por un fallo eléctrico en dos contadores, quizás en la refrigeración, que han ocasionado una abundante humareda visible por las ventanas que dan a la cuesta de los Capuchinos.

A las 9:28 horas se daba por controlado el incendio y se procedía a desalojar el denso humo que se había acumulado en las salas superiores. Los bomberos han utilizado la autoescala para acceder al lugar.

La alcadesa de Toledo, Milagros Tolón, acudió al Alcázar para conocer el alcance del suceso, en compañía del director del Museo del Ejército, el general Jesús Arenas. También se acercó hasta el lugar el presidente del PP en la provincia de Toledo, Carlos Velázquez, para interesarse por la situación, que fue controlada rápidamente por los bomberos.

Este incidente ha ocasionado el desalojo de los trabajadores del museo y la biblioteca, en un acto rápido, pero con desasosiego por la falta de información durante los pocos minutos que han estado esperando en la calle hasta la llegada de los bomberos.

Evacuadas las instalaciones, se han cerrado las puertas cortafuego para evitar que llegue el incendio. "Nuestros fondos están protegidos por estas puertas cortafuego, pero habrá que esperar, porque todo puede cambiar en un minuto", ha asegurado la directora de la biblioteca, María Dolores Cristóbal. 

Los bomberos del parque municipal de Toledo han sido activados por llamas en algún lugar entre las plantas 7 y 8 del edificio. También han acudido efectivos de la Policía Local.

Sobre las nueve de la mañana ya se ha reabierto el tráfico en Bisagra que se cortó por seguridad. El desvío ha provocado retenciones en Doce Cantos.