Cambiarán el pavimento de la calle Prado por otro más uniforme

Leticia G. Colao
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La actuación se realiza con dos objetivos, reducir la velocidad de los vehículos al dar más prioridad al peatón y mejorar la accesibilidad de estos con un pavimento más plano y uniforme

Cambiarán el pavimento de la calle Prado por otro más uniforme - Foto: Reviejo

La calle Prado verá remodelado su pavimento, siguiendo las obras de reforma y rehabilitación que se llevarán a cabo en la calle Alfares y Marqués de Mirasol. Con ello, se procederá a sustituir el pavimento en la zona de rodadura de la citada vía dentro de la Estrategia de Desarrollo Urbano Sostenible e Integrado 'Talavera 2017-2023', cofinanciada en un 80 por ciento por el Fondo Europeo de Desarrollo Regional FEDER.

Los trabajos retirarán el adoquinado actual por otro igual al de Alfares y más cómodo tanto para peatones como para vehículos. El proyecto, que ya ha salido a licitación, lo hace con un presupuesto base de 95.200 euros sin impuestos.

La calle Prado es una de las vías principales dentro del eje comercial y económico, además de travesía histórica, junto a la calles San Francisco y Trinidad, que delimita el ámbito del casco histórico, y donde se pretende dar mayor protagonismo al peatón en detrimento de la circulación rodada. Se trata de una zona con una intensidad de tránsito motorizado de casi 300 vehículos a la hora, lo que unido a su pavimento adoquinado y un alto número de peatones, genera un gran impacto respecto a la contaminación acústica y atmosférica del entorno. Por ello, y según informa la memoria del proyecto, son necesarias estas actuaciones de disminución de los niveles de ruido procedente del tránsito motorizado.

El concejal de Hacienda, Contrataciones y Seguimiento de las Concesiones, Luis Enrique Hidalgo, indica a La Tribuna que estas  obras se realizan como continuación de la actuación sobre las calles Alfares y Marqués de Mirasol y junto con la nueva delimitación de la Zona como de Bajas Emisiones (ZBE), que pretende reducir al máximo la circulación de vehículos de la vía.

La actuación se realiza así con dos objetivos fundamentales, la reducción de la velocidad de los vehículos al dar más prioridad al peatón, y mejorar la accesibilidad y comodidad de estos al colocar un pavimento con una planeidad más uniforme que el actual adoquinado de granito, con zonas muy irregulares.

Así, se insiste en que será una calle de usos compartidos pero con prioridad peatonal, disuadiendo el tránsito de vehículos mediante la limitación de velocidad máxima a 10 -20 kilómetros/hora.

Hidalgo explica que con este proyecto se busca una intervención «basada en el urbanismo táctico» que mejore la escena urbana y ponga en valor su potencial comercial, dinamizando el tejido productivo, comercial y la creación de empleo en las áreas urbanas más desfavorecidas del centro urbano.

La remodelación de la zona de rodadura, es decir, del espacio por el que transitan los vehículos, no así las aceras, se realizará entre la plaza de la Trinidad y la avenida Gregorio Ruiz.

En esa apuesta por atraer más personas a una zona de comercio tradicional, se trabaja en un diseño con espacios amables, con escala humana y que invite a los peatones a transitar con libertad y sin peligro. «Se trata de hacer la zona más atractiva para atraer a más ciudadanos a que paseen, compren y hagan su vida diaria», devolviendo la vida al proyecto de centro comercial abierto y con la apuesta del equipo de Gobierno de «potenciar el comercio local y de proximidad». No obstante, recuerda el concejal, esta vía es el nexo de unión de las dos zonas comerciales más históricas de Talavera, las calles San Francisco y Trinidad.

La ejecución de los trabajos, aún sin concretar, se llevará a cabo en el segundo semestre del presente año.