La Catedral de Toledo ha acogido esta mañana, solemnidad de la Anunciación del Señor, la ordenación episcopal de Alejandro Arellano, actual decano del Tribunal de la Rota Romana y sacerdote oriundo de Olías del Rey. La ceremonia, presidida por el Secretario de Estado de Su Santidad, el cardenal Pietro Parolin, ha sido concelebrada por cuatro cardenales y veinte obispos, algunos de ellos llegados des- de Roma y de otros lugares de Europa y América. Junto al cardenal Parolin han participado como obispo consagrantes, el arzobispo de Toledo, Francisco Cerro, y el cardenal Mario Grech, secretario general del Sínodo de Obispos.

«Querido Alejandro, los requisitos indispensables para ejercer la tarea que te ha sido encomendada son por tanto un corazón iluminado y movido por el amor, una oración confiada y constante y un abandono humilde en el Señor», afirmaba el cardenal Parolín durante la homilía, quien recordaba que «los obispos, sucesores de los apóstoles, están llamados al servicio de la unidad y la solidaridad en la Iglesia y entre las Iglesias».

El cardenal Pietro Parolin durante la ordenación episcopal de Arellano.Por su parte, el nuevo arzobispo agradecía al papa Francisco, haberle elegido para el episcopado de manera «directa y personal, dándome la especial certeza de que ésta es la voluntad de  Dios para mí». «Por ello, y por todos los signos de benevolencia que me ha manifestado y me manifiesta, mi agradecimiento, y el afecto inmenso de mi corazón, unido a la comunión más plena con el ministerio petrino», afirmaba Arellano, quien recordaba que «no es arzobispo de una Iglesia particular». «No tengo una porción concreta de fieles donde sea Pastor. Creo que esta realidad me exige dilatar los espacios del alma, ampliar horizontes. Mi servicio pastoral es a toda la Iglesia, a todos los cristianos que la conforman; aún más: a cada ser humano llamado por Dios a la felicidad plena», concluía.

A la ordenación episcopal han asistido las alcaldesas de Toledo y Olías del Rey, Milagros Tolón y Charo Navas, , que han estado acompañadas de algunos miembros de las respectivas corporaciones municipales. También ha asistido a la celebración el delegado de la Junta, Javier Úbeda y la diputada y candidata de VOX a la Alcadía se Toledo, Inés Cañizares. 

El pasado 2 de febrero el Papa Francisco nombró obispo titular de Bisuldino a monseñor Alejandro Arellano Cedillo, confiriéndole el título personal de arzobispo.

El arzobispo de Toledo,  Francisco Cerro, y el obispo auxiliar, Francisco César García Magán, expresaron su felicitación personal tanto al nuevo arzobispo como a la Confraternidad Sacerdotal de Operarios del Reino de Cristo, a la que pertenece y, al mismo tiempo, quisieron manifestar su gratitud, en nombre de toda la archidiócesis, al Santo Padre por este nombramiento, que honra a la archidiócesis primada.

Desde el 30 de marzo de 2021 Alejandro Arellano es el decano del Tribunal Apostólico de la Rota Romana. Además, forma parte del grupo de consultores de la Congregación para los Institutos de Vida Consagrada y las Sociedades de Vida Apostólica.

Nacido en Olías del Rey el 8 de junio de 1960, monseñor Alejandro Arellano realizó sus primeros estudios eclesiásticos en el Instituto Teológico San Ildefonso, de Toledo, y recibió la ordenación sacerdotal en Toledo el año 1987. Pertenece a la Confraternidad de Operarios del Reino de Cristo.

Es Doctor en Derecho Canónico por la Pontificia Universidad Gregoriana de Roma, licenciado en Estudios Eclesiásticos por la Facultad de Teología de Burgos y auditor de la Congregación para las Causas de los Santos. En el año 2007 fue nombrado Prelado Auditor del Tribunal de la Rota Romana. Ha sido Auditor de la Rota de la Nunciatura Apostólica en España. Ha impartido clases en la Universidad San Pablo CEU y profesor en la Facultad de Derecho Canónico de la Universidad San Dámaso, de Madrid, y en la Pontificia Universidad Gregoriana, de Roma. Además, es profesor de Jurisprudencia en el Estudio Rotal del Tribunal Apostólico de la Rota Romana.

Además ha sido Vicario Judicial Adjunto en la Archidiócesis de Madrid, Juez Diocesano en primera y segunda instancia en la Archidiócesis de Toledo y Juez Diocesano en la diócesis de Getafe. Es miembro de la Comisión Especial de la Congregación del Clero y Consultor de la Congregación para los Institutos de Vida Consagrada. Tiene diversas publicaciones en el ámbito del Derecho Canónico.