El niño de siete años que fue atropellado el martes por la tarde en la carretera de San Román evoluciona favorablemente de las heridas sufridas en el accidente. El menor, que fue arrollado por un vehículo a la altura del kilómetro 2 de la CM-5001 cuando andaba por el arcén de la vía acompañado por un grupo de chicos, fue trasladado inicialmente al Hospital General Nuestra Señora del Prado de Talavera, aunque los facultativos que le atendieron en el centro hospitalario talaverano decidieron que lo mejor era evacuarlo en un helicóptero medicalizado al Hospital 12 de Octubre de Madrid.
Precisamente, desde el Departamento de Comunicación de las dependencias sanitarias madrileñas comentaron ayer a este diario que el pequeño, de etnia gitana y que junto a sus padres llevaba varios días acampado en una zona cercana a la gasolinera que hay justo antes de llegar a la urbanización Prado del Arca, se encontraba mejor y se estaba recuperando de manera satisfactoria.
Hospital de Toledo. Por otra parte, la niña talaverana de cuatro años que estuvo a punto de ahogarse tras sufrir un corte de digestión en una piscina de la vecina localidad de Pepino, continúa ingresada en el Hospital Virgen de la Salud de Toledo, donde aún permanece sedada en la Unidad de Vigilancia Intensiva. Según explicó a este periódico la madre de la menor, María Soledad Alarcón, la evolución de la pequeña, de nombre Paula, está siendo muy lenta, «aunque quizá está un pelín mejor», concretó.
Sobre este punto, señaló que los médicos retiraron recientemente a la niña una válvula que se encargaba de controlar su presión craneal y, al mismo tiempo, determinaron que ya podía tomar alimentos a través de una sonda. De todas maneras, María Soledad Alarcón subrayó que la recuperación será muy lenta. «Vamos para tiempo», aseveró al respecto.
Asimismo, la madre de la pequeña Paula aprovechó para aclarar que ella en ningún momento ha demandado públicamente ayuda para hacer frente a su estancia en Toledo durante el tiempo que la niña permaneciera hospitalizada. En un primero momento se hizo público que María Soledad Alarcón había demandado apoyos para alojarse en la capital regional, pero ella misma se ha encargado ahora de desmentir esta cuestión.
No obstante, agradeció «de corazón» a todos aquellos que la están echando una mano, pero volvió a concretar que su cabeza no está ahora para pedir ayuda a nadie, sino para centrarse de lleno en la recuperación de su pequeña, ingresada desde hace más de dos semanas.