El PSOE advierte de que esta concesión afectará a más centros

Susana Jiménez/Toledo
-

Mora asegura que el «pelotazo» que se plantea es aún mayor y califica de «impresentable» la fórmula

El Servicio de Salud de Castilla-La Mancha publicaba el pasado viernes los pliegos de la construcción del futuro hospital. - Foto: Yolanda Lancha Escribano

El PSOE considera «impresentable» la forma en la que el Gobierno regional está planteando el cambio de modelo en el sistema sanitario, utilizando para ello la continuación de las obras del nuevo hospital de Toledo. Y es que, si inicialmente los pliegos debían contemplar su construcción y gestión de los servicios no sanitarios, ahora resulta que también la concesión abarca a los hospitales del Valle y Provincial, al CEDT San Ildefonso también en la capital, así como a los centros de especialidades de Illescas, Ocaña y Torrijos, y a las «unidades periféricas» del Hospital Nacional de Parapléjicos.

Así lo denunciaba ayer el portavoz de Sanidad del PSOE en las Cortes, Fernando Mora, quien aseguraba no se trata de una concesión para gestionar los servicios del nuevo hospital, «sino de toda la ciudad de Toledo» y de centros de otras localidades, lo cual conlleva que el beneficio para la concesionaria «sea mucho mayor».

Una cuestión que «está fuera de lo que es la obra del hospital» y que también afectará a personal estatutario de dichos centros. Para Mora se trata de «un auténtico pelotazo», que tendrá repercusión tanto en los propios pacientes como en los profesionales.

Esta «extensión» a otros centros de la concesión del nuevo hospital de Toledo es una de las cuestiones que están siendo estudiadas por los servicios jurídicos del PSOE,  junto a otras como la privatización del tratamiento de la historia clínica,  de cara a un posible recurso contra estos pliegos.

Por otra parte, Mora  llamaba también la atención sobre otros aspectos que se desprenden de estos pliegos, como el «cerrojazo definitivo» a la posibilidad de que se aun hospital universitario, ya que como tal lo único que queda «es el nombre», o el que el 70% de las habitaciones contempladas sean dobles, en lugar de individuales, por lo que se preguntaba si es que los castellano-manchegos «somos menos» que los ciudadanos de otras regiones.