Víctor González Flores, un joven de Cazalegas de 28 años, salió ayer por la mañana de paseo con sus galgos y no volvió a su casa. Hacia las 11 horas, la gente que se encontraba en las inmediaciones de unas vaquerizas en este término municipal escucharon cuatro detonaciones. Después, hallaron el cadáver en pleno campo. La Guardia Civil ha abierto una investigación por esta muerte, rodeada también por la sustracción del vehículo de la víctima que debería estar en la zona.

El alcalde de Cazalegas, Amando Blanco, detalló ayer a este diario que la víctima había salido de casa sin armas y sólo con los perros. Asimismo, indicó que tenía heridas de bala en la cabeza y en el abdomen, aunque desde los servicios de emergencias, sólo mencionan impactos en la cabeza y en la cara.

Los hechos ocurrieron a plena luz de día y en pleno campo, en una zona sembrada de una finca conocida popularmente como ‘Maris’, junto a la finca ‘Correlejo’ y a unos 400 metros de la A-5 y a un kilómetro y medio de la carretera hacia la presa de Cazalegas y el desvío a la Asociación Recreativa Los Alcores. Los empleados de la granja de esta finca fueron los que encontraron el cuerpo de la víctima, que fue trasladado al Instituto Anatómico Forense de Toledo.

En la zona donde apareció el cadáver, se encontraba un remolque propiedad de la víctima, pero no había ni rastro del vehículo que había utilizado el joven para llegar hasta allí y de algunos de los galgos de su propiedad. Así lo detalló el regidor municipal, quien se mostró muy consternado por estos dramáticos hechos.

 

certificación muerte. A pesar de que los disparos se oyeron hacia las 11 horas, los servicios de emergencias no recibieron el aviso hasta las 12,17 horas. Hasta el lugar, se desplazaron agentes de la Guardia Civil, una UVI y un ambulancia con soporte vital básico. Sin embargo, el personal sanitario sólo pudo certificar el fallecimiento. El levantamiento del cadáver se produjo hacia las 13,30 horas.

Este joven, que cumplió los 28 años en octubre pasado y era aficionado al fútbol, vivía con su novia y tenía planes de boda. Hay entre tres o cuatro kilómetros desde su residencia y el lugar donde apareció el cuerpo  «Es una buena familia y muy querida», recalcó el alcalde de Cazalegas, quien subrayó que gran parte de la población se había desplazado a la casa familiar de la víctima para apoyar a sus allegados. Así, más vecinos detallaban que la víctima nunca había tenido un enfrentamiento. «La gente está cabreada», subrayó el regidor municipal sobre el sentir popular por las circunstancias de este terrible suceso.

Víctor, el mediano de tres hermanos, trabajaba en una empresa familiar dedicada a la construcción, junto con su hermano mayor y sus padres. Sus progenitores pertenecían también a la localidad, por lo que el suceso ha conmocionado a toda esta población de unos 2.000 habitantes ubicada en la Sierra de San Vicente y a 10 kilómetros de Talavera.

El titular de los juzgados de Primera Instancia e Instrucción de Talavera encargado del caso ha decretado ya el secreto de sumario por la muerte.