«Estoy molesto, cabreado e indignado porque aunque no seamos profesionales y las cantidades económicas que ganan los futbolistas sean mínimas por objetivos, el compromiso es fundamental». Son las declaraciones a este diario del entrenador del Torpedo 66, Luis Quintas, después de la derrota del domingo por 3-0 en Tarancón donde su equipo terminó con ocho.
El técnico insiste en que el compromiso «con el equipo, con el club y con el entrenador debe ser máximo». Y habla de ejemplos concretos: «En la noche del sábado hubo futbolistas que se confundieron: hubo alguno que no se presentó a la convocatoria y si prevalece tu vida personal para irte a una boda o a un bautizo, a una comunión o a una fiesta y dejas tirado a tus compañeros, dejas tirado a un grupo entero». Eso sí, Quintas quiere dejar claro que «no quiero señalar personalmente a ese futbolista porque el error lo cometemos todos y es un granito de arena de cada uno y al final si hay siete futbolistas que sí dan la cara y cuatro que, por unas circunstancias u otras no lo hacen, al final no remamos todos para el mismo lado. Y fue lo que pasó el domingo».
Apuesta por dar un voto de confianza a la plantilla y que lo sucedido el domingo sirva «de cura de humildad para hacer borrón y cuenta nueva y que por lo menos todos hagan examen de conciencia y vean que ya que te has comprometido para hacer ciertas cosas, que cumplan hasta el final, más que nada por respeto hacia uno mismo, a los compañeros, a la directiva y al cuerpo técnico».
Y es que el Torpedo 66 jugó a las 11,30 del domingo en Tarancón con lo que la expedición partió a las siete de la mañana: «El cansancio del viaje, algunos futbolistas que tampoco tuvieron mucho descanso esa noche, todo se acusó; fueron un cúmulo de cosas que al final tuvo como consecuencia la derrota y la impotencia que producen esas circunstancias de tantas tarjetas como tuvimos en ese partido».
El equipo vio ocho amarillas y una roja directa para Carmelo que tendrá que cumplir dos partidos de sanción, al igual que Torralba que fue expulsado por dos amarillas y que uno es por protestar, y también dos vio Román al que le ha caído un partido, como a Pedro Pérez que alcanzó la quinta. Considera que «los enfrentamientos que algunos futbolista tuvieron con el trío arbitral sobraban; hay que tener la cabeza fría y pensar que es un partido que ya está perdido». La consecuencia es que Quintas tiene para esta jornada 12 futbolistas porque además hay dos lesionados.