Familiares, amigos y compañeros de José Ángel de Jesús han viajado durante toda esta noche para asistir, esta mañana, al homenaje que cada año celebran en el municipio de Sallent de Gállego (Huesca), donde hoy hace 15 años que el joven talaverano fue asesinado por ETA. Su padre, José de Jesús, relató ayer a La Tribuna que, como cada año, él mismo costea un autobús para que puedan acompañarles «todos aquellos que así lo quieran». En él, además de recoger a gente en Talavera, también lo hacen en Madrid y en otros municipios cercanos.

 Allí, y junto a la familia de Irene Fernández, la compañera de José Ángel que también falleció en el atentado, recordarán a los dos guardias civiles con actos en el cuartel, una misa en la iglesia del municipio y posteriormente una ofrenda floral en la plaza, donde tuvo lugar el fatal suceso que acabó con su vida.

También estarán acompañados por numerosos vecinos del pueblo que vivió la tragedia en el año 2000 así como por autoridades regionales y provinciales, tanto civiles como militares, de la zona. «En el pueblo no cabe ni un alfiler en la iglesia ni en la plaza», resalta el padre.

El autobús con los seres queridos de José Ángel regresará a Talavera poco después de los actos conmemorativos, que continuarán mañana, 21 de agosto, con la ya habitual misa en honor del talaverano en la iglesia de las Bernardas. Será a las 20,30 horas.

22 años. En la jornada de hoy se cumple un nuevo aniversario del asesinato de José Ángel de Jesús Encinas y de su compañera Irene Fernández cuando éste contaba tan sólo con 22 años. Ahora tendría 37, recordaba su padre, quien asegura que por mucho que pase el tiempo, «todos los días su recuerdo sigue vivo con nosotros, es algo crónico. Te levantas con ello en la mente, y estos días se agudiza aún más».