El buen tiempo anima a hacer turismo, pero la obra del Greco gana al sol y las altas temperaturas impropias del otoño. Toledo se ha convertido en un buen reclamo para las personalidades políticas y de cualquier otro ámbito a pesar de que su estancia suele ser fugaz y desapercibida para la mayoría. Así ocurrió ayer con la visita de José Luis Rodríguez Zapatero, expresidente del Gobierno, a nuestra ciudad, acompañado en todo momento de José Bono, expresidente del Congreso y de la región. Si bien, en esta ocasión ambos exprimieron bien la jornada turística y tuvieron ocasión de empaparse del pintor cretense gracias a una apretada agenda, que también hizo hueco para el encuentro político.

La jornada de mañana fue intensa. Zapatero y Bono se acercaron a la exposición ‘El Greco: Arte y Oficio’, en el Museo de Santa Cruz. Ambos recorrieron una muestra del arte, la técnica, el color, la impronta, y la huella de su taller y de los pintores que tanto aprendieron de la mano del candiota. Pero el día prometía mucho más y también tuvieron ocasión de visitar el Hospital Tavera, que conserva el retablo dedicado al Bautismo de Cristo, y varias obras destacadas del Greco.

Después de una mañana de tanto arte, Zapatero y Bono hicieron un parón para juntarse con el secretario regional del PSOEy alcalde de Toledo, Emiliano García-Page, para comer. Ya buen seguro, aunque eso quedará relegado a la privacidad,  la política centró la comida y la sobremesa. Los tres se reencontraron de nuevo, dado que en más de una ocasión Zapatero ha compartido mesa y mantel con  Bono y Page en los últimos años.

La agenda marcaba la visita a la Catedral a las 16.30 horas, aunque se produjo un retraso de media hora. Una importante cola de turistas que esperaba para entrar se sorprendió ante la llegada de cuatro o cinco coches, pero sobre todo, al ver salir a Zapatero y a Bono escoltados por varios guardaespaldas entrando con rapidez al templo. Apenas se dejaron ver, aunque el expresidente de Gobierno, tuvo tiempo de sonreír a los pocos que pudieron cruzar una mirada.

El Greco atrae, de eso no hay duda, y Zapatero tenía ganas de conocer de cerca cómo vive Toledo el IV Centenario de su fallecimiento. Y la cercanía de Madrid invitó al expresidente del Gobierno a disfrutar del pincel de un pintor innovador, rendido a una amplia paleta de colores intensos y cielos cautivadores. Quizá otros muchos políticos del PSOE también se animen a un día de turismo en cuánto Zapatero comente su experiencia en los espacios Greco que visitó ayer.

más rostros conocidos. Los empleados del Museo de Santa Cruz también dieron la bienvenida ayer a Cayetano Rivera Ordoñez y Eva González, una pareja muy conocida. El torero y la presentadora de ‘Masterchef’ también se acercaron a disfrutar de esta última gran exposición del Greco en Toledo por la mañana. Su visita tampoco pasó desapercibida a pesar de que lo intentaron porque se trata de una de esas parejas habituales del papel couché desde hace tiempo.