No cabe duda de que, entre las muchas bondades de Talavera está la de ser tierra materna de sobresalientes figuras del mundo de la creatividad. Son talaveranos reconocidos dibujantes como Aitor Saraiba hasta publicistas cuyos trabajos se encuentran en lo más alto de la profesión, como Sergio del Puerto, talentos que llevan con la cabeza bien alta el lugar que les vio nacer.
Hace una semana los talaveranos se hacían eco del cartel que promocionará las próximas Ferias de San Mateo; la ingeniosa fluidez de ideas que se ven recogidas en la imagen fue obra de Lucas Fernández, un nombre que tal vez resulte familiar, puesto que no es la primera vez que la Ciudad de la Cerámica reconoce su labor de diseño. En esta ocasión, ha conseguido unir la magia de las ferias talaveranas con la fama de su pregonero, el talaverano Carlos Maldonado, ganador de la última edición de Masterchef, por lo que ha ideado un singular cartel donde un postre blanquiazul, como no podía ser de otra manera, anima a talaveranos y vecinos de otros puntos a disfrutar de unas sabrosas fiestas de septiembre.
Fernández nació en Talavera en 1977 y siempre se ha considerado un hombre ordenado y amante del arte minimalista. Su primer contacto con el mundo creativo comenzó cuando era un niño, aunque su interés por el orden le llevó a estudiar Delineación, profesión que ejerce todas las mañanas y que desde 2008 combina por las tardes con su afición por la cartelería. El diseñador describe su trabajo como un intento de abrir los ojos a la gente, «hay mucha gente dormida, la gente tiene que mostrar lo que tiene».
El primer concurso al que se presentó fue en 2008 para la conmemoración del Día de la Mujer, consiguiendo quedar como finalista; meses después se presentó al certamen de las Ferias de Talavera y ganó. A partir de ahí decidió ampliar su recorrido y se desplazó a otras zonas de España. Su experiencia fuera le ayudó a conocer a influyentes diseñadores, nuevas técnicas de cartelería, trabajar con más materiales y sobre todo a formarse. «Hay que reinventarse y aprender día a día», subraya.
Los viajes y la experiencia en los certámenes han supuesto un cambio en la concepción de sus obras. Le han ayudado a mejorar las técnicas que utiliza en sus trabajos, que tienden cada vez más al diseño minimalista integrando nuevos colores, tipografías más personales, nuevas gamas de color y formas de iluminación; la composición de sus nuevos diseños va definiendo un estilo muy particular que a partir de 2012 se aleja de las simples fotografías caracterizádose por el uso de la filigrana de papel, una técnica poco conocida que tiñe sus carteles de personalidad.
Quienes han podido apreciar sus obras dentro y fuera de Talavera no han podido pasar por alto la magia de sus creaciones. San Sebastián, Bilbao, Zaragoza, Cáceres, Toledo, Astorga, Lleida o Segovia son algunos de los lugares donde el talaverano ha recogido premios.
El delineante siempre ha mantenido que la inspiración nace de lo cotidiano, en cualquier momento del día, «en el sitio menos indicado surgen las ideas», por eso se asegura de llevar siempre con él una libreta para hacer los primeros esbozos que después van tomando forma en el ordenador. Además, en muchas ocasiones, sus obras llevan influencias de los dos referentes que más admira, Isidro Ferrer y sus compañeros Laura Farelo y Alberto Torres, a quienes valora enormemente y culpa de ser los responsables de gran parte de su aprendizaje.
Aunque muchos le lleven la contraria Lucas sostiene que «ya todo está inventado, lo que tienes que hacer es adaptarlo a tu momento, cambiar el punto de vista y verlo desde otra perspectiva». Un consejo aplicable a todas las parcelas de la vida.