¿Por qué 33? En el caso de las consultas del médico, cuentan que pide que los pacientes digan 33 porque lleva muchas consonantes fuertes y permite evaluar la normalidad de las vibraciones que se producen en la garganta al pronunciarles, lo que puede ser indicador de una enfermedad. En el caso de las Cortes regionales ayer dijeron 33, pero al número de diputados que habrá en el Parlamento autonómico a partir de las próximas elecciones de 2015. ¿Y por qué 33 en este caso? Pues porque Cospedal prometió hace dos años que reduciría casi a la mitad el número de parlamentarios autonómicos. Con esta nueva cifra, las Cortes tendrán 16 diputados menos de los que hay ahora.
Con esas 16 parlamentarios menos el Parlamento regional podrá seguir funcionando y haciendo leyes durante la próxima legislatura. Cospedal subió ayer a la tribuna del salón de plenos para asegurar que no habrá ningún problema: «Sabemos que podemos hacer nuestro trabajo siendo menos diputados». La presidenta regional defendió que la medida de reducir el número de parlamentarios es también una «actuación ejemplar» de los políticos. «Los ciudadanos lo ven bien en los tiempos que corren, en los que se les ha exigido muchos esfuerzos a los ciudadanos», recordó ayer Cospedal, «este Gobierno se los ha pedido».
La presidenta convenció a los suyos hasta tal punto que sus diputados la aplaudieron al final de su intervención; unos aplausos que duraron más de lo habitual y que Cospedal intentó cortar tirando dos veces hacia abajo del brazo del consejero de Presidencia, Leandro Esteban, que es su compañero de escaño.
- Foto: David Pérez Además la presidenta autonómica se mostró convencida de que este tipo de medidas ayuda a rebajar la desafección de la sociedad a la política. Ayer reivindicó que se debe «acercar las instituciones a los ciudadanos» y que eso es más efectivo que cambiar una Constitución «que nos ha dado tanto a este país». Aprovechó también para recordar otras medidas que ella ha tomado en Castilla-La Mancha en esta dirección como quitar el sueldo fijo a los parlamentarios o eliminar organismos públicos.
Las Cortes no solo cambiaron ayer el número de diputados que habrá a partir de las próximas elecciones. También recuperaron el sistema electoral de reparto de escaños por provincia que había en los ochenta en Castilla-La Mancha y que ha habido todos estos años en el Congreso. Este sistema consiste en poner un mínimo de tres diputados por provincia. Los restantes se reparten en función de la población que haya en ese momento. Se trata de un mecanismo automático que permitirá que para cada elección pueda haber un reparto diferente de diputados por provincia. Ese sistema estuvo funcionando en la región en el 86, cuando se aprobó por consenso entre PP y PSOE, pero en el 98 se cambió por una Ley Electoral en la que se fijaba exactamente qué número diputados tenía que haber en cada provincia. A partir de ese momento ese reparto se ha venido fijando por ley, hasta ahora.
Cospedal dedicó parte de su discurso a valorar las bondades del nuevo sistema. Aseguró que se impedirá que una provincia tenga más del doble de diputados que otra y garantizó que va a ganar quien consiga más votos. Con los últimos datos de población bajaría el número de diputados de Toledo de 13 a 9 y los de Cuenca y Guadalajara de 9 a 5 (serían las tres provincias impares). Ciudad Real bajaría de 12 a 8 y Albacete, de 10 a 6.