La Unión Española Fotovoltaica (UNEF) reunió ayer en la sede de Fedeto a representantes políticos, sindicatos, asociaciones de distintos ámbitos y a expertos del sector eléctrico para estudiar la situación del sector en Castilla-La Mancha y en el resto de España. La agrupación organizadora calcula que las últimas reformas del Gobierno del país en materias renovables ha mermado en 173 millones de euros netos los ingresos de los inversores en esta energía en 2014.
El director general de UNEF, José Donoso, destacó que el sector ha resultado «muy castigado» durante esta última legislatura en el Gobierno de España y abogó por dejar libre mercado en el área energética para no influir en la competencia entre las propuestas a los usuarios. Se refería al conocido como ‘Impuesto al sol’, que ha ralentizado el crecimiento de este tipo de consumo, pese a una reducción calculada del 85 por ciento en el coste de la energía fotovoltaica en los últimos años.
Asimismo, mencionó que Castilla-La Mancha tiene unas características idóneas para albergar plantas fotovoltaicas de grandes dimensiones y para el autoconsumo, por la cantidad de terreno y por la abundancia de sol. De este modo, llamó la atención por el beneficio para las pequeñas y medianas empresas.
Donoso subrayó también que la región figura como la primera en la clasificación de las mayores productoras de energía fotovoltaica de España, teniendo en cuenta que crea 1.685 gigawatios por hora. Esta cantidad supuso el 14,4 por ciento de la demanda eléctrica de Castilla-La Mancha.
La UNEF resaltó que la producción permitió evitar la emisión de 1.124 toneladas de dióxido de carbono, que implicó un ahorro de 7,3 millones de euros. «Podemos deducir que 2016 será el año de la consolidación del sector en Castilla-La Mancha con un importante crecimiento en las instalaciones aisladas y algo menos en las de conexión a red», apuntó la organización en un comunicado, la cual recordó que las explotaciones agrícolas ahorran costes con estas inversiones.
La UNEF está formada por más de 200 empresas, entidades y agrupaciones y representa a más del 85 por ciento de la actividad del sector en España. Al respecto, aglutina a productores, instaladores, ingenierías, fabricantes de materias primas, distribuidores y consultores.
Por su parte, el director general de Industria, Energía y Minería de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, José Luis Cabezas, mostró el apoyo del Gobierno regional a las energías renovables y a la fotovoltaica en concreto, así como respaldó el uso del autoconsumo. «No se entiende que la gente no pueda poner paneles en su casa. Ahora no se puede», precisó en referencia a la regulación del Estado.
Cabezas añadió a continuación que debería suprimirse el ‘Impuesto del sol’, un bien que debiera ser gratuito. Además, dijo que Castilla-La Mancha debe estar preparada para la revolución próxima del sector energético y aseveró que se debe instalar el mayor número de potencia con energías renovables.
«Desde el año 2011, ha habido un desarrollo cero en renovables, porque la prioridad no ha sido la energía», manifestó y agregó que la Junta de Comunidades ha dispuesto una partida de cinco millones de euros para subvencionar el autoconsumo y la eficiencia del ahorro energético mediante unas órdenes que verán la luz en 2016.