Sergio Blasco evitó que el astado entrase al recinto ferial

Daniel Pérez
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El diestro talaverano, que torea esta tarde en la Feria de San Isidro de la ciudad, alejó al toro cuando éste estaba a punto de acceder a La Alameda por la entrada que da al lago

El torero Sergio Blasco demostró en la mañana de ayer que las agallas de un torero no encuentran parangón en ninguna otra profesión. Gracias a su valentía, el diestro talaverano evitó que la fuga del astado de la Plaza de Toros se convirtiese en una tragedia mucho mayor. Y es que, cuando el animal se disponía a entrar en La Alameda por el paso de cebra que da al lago, el lidiador logró a base de capotazos que el toro modificase su trayectoria y que éste entrase a los Jardines del Prado. «Fue por instinto», reconoció a este diario.

Todo sucedió sobre las 13,30 horas mientras el torero enseñaba algunas nociones de este arte a más de 100 niños en el coso taurino de la Caprichosa. «Por alguna circunstancia se han abierto las puertas de los toriles y un toro del espectáculo de recortes de ayer se escapó. En vez de irse a la plaza por el callejón, se fue a la puerta de cuadrillas y salió directo a la calle», explicó.

Al percibir la peligrosidad de la situación, Sergio Blasco salió con el capote entre sus manos para intentar reconducir a la plaza al astado. En el parque situado en las inmediaciones el animal había corneado a una persona y, tras darlo un par de capotazos, consiguió guiarlo a los Jardines del Prado evitando que éste accediese al recinto ferial.

La huida del animal fue hacia  la entrada principal de los jardines y, tras él, el torero intentaba alcanzarlo sin mucho éxito. Mientras confesó ver a muchos padres que, asustados lanzaron a sus hijos lo más lejos posible para salvarlos de una posible cogida. «Fue dramático», confesó. Dentro del caos propio del momento, el torero indicó que el animal era manso y su intención era huir, sin embargo a todos los que se encontraba en su camino «los atropelló».

Tras llegar a los arcos de la entrada, afrontó la ampliación de los jardines hasta que llegó a la avenida de Castilla-La Mancha y posteriormente a la rotonda de Salvador Allende. En ese instante los vehículos que circulaban por la zona evitaron que accediera al recinto ferial y a Ronda del Cañillo por lo que el animal continuó su rumbo al puente del Príncipe. Hasta ahí también se desplazó un Sergio Blasco que no dudó en situarse junto al toro y, a base de capotazos intentó parar su huida, sin embargo, al ver que era imposible porque el animal estaba muy asustado, un miembro de la Policía Local impactó con su vehículo de lleno con el animal provocando su muerte.

Tras su paso, el animal había dejado «unos 20 heridos y dos o tres de ellos con cornadas graves», reconoció. Además, señaló  que tanto un niño que se encontraba en el patio de cuadrillas como un joven que estaba en el callejón fueron los que se llevaron la peor parte en la fuga de 20 minutos de este animal.