El PP municipal está hecho un lío con las obras que se llevan a cabo en el nuevo hospital de Toledo. Dando por sentado que no son las de construcción de los edificios sanitarios, sospecha que «no existe» documentación que justifique el trabajo que ha autorizado el equipo de Gobierno para retranquear la valla o acondicionar la parcela pero, por otro lado, confía en «que debe de existir». El caso es que ha pedido que le enseñen la licencia y que le detallen si se ha pagado. Como hasta ahora no ha logrado una respuesta José Manuel Velasco pregunta: ¿se puede iniciar una obra sin pagar la licencia correspondiente? ¿Qué le pasaría a un toledano particular si hiciera lo mismo?
El coordinador de los populares asegura que en la tramitación administrativa de esta obra todo está descuadrado. La única licencia conocida, a la que se remite siempre el Gobierno municipal, se concedió en noviembre del año pasado «para construir» el nuevo Hospital Universitario de Toledo «supeditada al cumplimiento» de una serie de «condicionantes» (proyecto de ejecución adaptado al plan funcional del hospital y propuesta urbanística definitiva del estudio de movilidad y de accesos) que el propio concejal de Urbanismo ha confesado cada ocasión que se le pregunta (la última vez la semana pasada) que aún no se han aportado.
En medio de todo esto, cuando se reinicio la obra con todo el boato, el PP pidió los papeles y le facilitaron un ‘proyecto de ejecución de implantación de obra y adecuación de la parcela’ que, según Velasco, «no cubre el expediente» para justificar la autorización que el Ayuntamiento ha concedido a la Junta de Comunidades para meterse a trabajar en el recinto del hospital.
Es verdad que en la licencia del 4 de noviembre se habla de que «el proyecto de ejecución de demolición y de actuaciones previas se deberá adecuar al proyecto básico autorizado con la presente licencia», que podría ser lo que se ha concedido, pero antes de eso se aclara que «con carácter previo al inicio de las obras se deberá aportar el correspondiente proyecto de ejecución, que desarrolle el último proyecto básico visado; el cual contendrá la totalidad de las instalaciones de la edificación».
Por lo tanto, según el concejal del PP, «no puede ser» que los albañiles estén moviendo vallas y carretillas de arena con la licencia del 4 de noviembre, «tiene que ser otra autorización independiente» pero cuando la oposición lo pide el Gobierno del Ayuntamiento no se lo entrega, no sabe por qué, ni quiere anunciar lo que ocurriría en caso de que no exista esa otra presunta licencia. «Prefiero pensar que existe», señala, y que se ha pagado, como se le exigiría a cualquier otro ciudadano de a pie.