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La Empresa Municipal de la Vivienda va a tener bastante trabajo en los últimos meses del año. La Junta de Gobierno Local del Ayuntamiento de Toledo aprobó el miércoles la encomienda de gestión de una docena de obras a la entidad pública. Actuaciones que cuentan con un presupuesto de 400.000 euros y que emplearán a 35 personas. Así lo afirmó ayer el concejal de Urbanismo y vicepresidente de la EMV, Javier Nicolás, quien explicó que en los próximos días comenzarán los trabajos de mejora de varios espacios públicos y edificios municipales.
Los 400.000 euros proceden de la rescisión del convenio que el Ayuntamiento mantenía con la Diputación Provincial para rehabilitar las viviendas de Esteban Illán a fin de alquilarlas para jóvenes. Un dinero que se invertirá en los nuevos aseos del Paseo del Carmen, la adaptación bar-cafetería del Centro de Mayores del Polígono, la reparación acerado en calle Retamosillo, el espacio juvenil de co-working en Hiper Usera, la reparación de un muro de la piscina de Azucaica, la rehabilitación edificio en Paseo del Tránsito, el rebajado de aceras en diversos pasos realzados o la repavimentación de la plaza del Consistorio.
También ejecutarán la mejora del pavimento en la plaza de Santo Domingo, la reforma interior en vivienda de la calle Canteros, el acondicionamiento de solares en Santa Bárbara y varias actuaciones en la red de Centros Cívicos Municipales.
Nicolás explicó que las actuaciones empezarán en las próximas semanas y se ejecutarán entre los meses de noviembre y diciembre, salvo algún proyecto aislado que se dilatará hasta los primeros compases de 2015.
Respecto a las críticas del PP relativas a que encomendar las obras a la EMV supone un sobrecoste del ocho por ciento, Nicolás afirmó que el Gobierno municipal va a seguir haciendo «todo lo posible» para «dar viabilidad» a la empresa pública.
Por su parte, el portavoz municipal, Rafael Perezagua, denunció que el principal partido de la oposición «busca cargarse» la EMV desde el inicio de la legislatura advirtiendo que los ‘populares’ también encomendaron obras a la empresa pública cuando gobernaban, entre ellas el Palacio de Congresos.