UPyD Talavera pide a Rosa Díez que dimita y deje elegir al partido

L.T.
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La asamblea local de Unión, Progreso y Democracia exige un ejercicio «de reflexión y autocrítica» tras las elecciones andaluzas con el fin de mejorar el servivio a la ciudadanía

La agrupación local de Unión Progreso y Democracia en Talavera ha pedido a Rosa Díez y al Consejo de Dirección que ella preside que en el próximo congreso extraordinario «den un paso atrás, dimitan y no opten nuevamente al cargo que hoy ostentan, para permitir que el partido, libre de su influencia, pueda tomar las decisiones y reformas que los afiliados consideren oportunas y necesarias para la adecuada regeneración del partido».

Así lo explica en nota de prensa su delegado local y candidato a la Alcaldía en la ciudad, Eugenio Moreno Luján, después de la postura tomada por afiliados y simpatizantes en la última asamblea local.

En ella, explican también que UPyD «ha sido y es, el partido político pionero en la lucha contra la corrupción, el bipartidismo y por la regeneración democrática en nuestro país». Este partido, añaden, abandera las transformaciones políticas que hoy sacuden el panorama nacional mientras que este proyecto «está en plena vigencia, es el más valioso de cuantos existen actualmente y es más necesario que nunca».

Es por ello que se muestran plenamente convencidos de que los últimos resultados electorales negativos, no van a empañar la «excelente trayectoria de éxitos y logros» que la formación política ha cosechado en defensa de los derechos sociales, económicos y políticos de los españoles.

No obstante, sí consideran que los mencionados resultados merecen que desde UPyD se haga un ejercicio de reflexión y autocrítica, con la finalidad de mejorar el servicio que se presta a la ciudadanía, y de dar un nuevo impulso al proyecto político del partido.

Congreso. Para lograrlo, desean que la celebración del congreso extraordinario sea la ocasión que permita la reforma del régimen de funcionamiento interno del partido, de sus órganos de dirección y de su política de comunicación, para lo que exigen la «máxima lealtad» al partido y a su proyecto político, de sus cargos orgánicos y públicos en sus declaraciones públicas, así como la dimisión de su máxima dirigente, Rosa Díez.