Los europeos que disfrutaron de una beca Erasmus durante su formación académica sufren una tasa de desempleo un 23 por ciento menor que el resto de jóvenes en los cinco años siguientes a su graduación e, incluso, el riesgo de desempleo de larga duración se reduce a la mitad si se ha cursado parte de los estudios en otro Estado de la UE gracias a esta ayuda europea, según un informe que dio a conocer ayer la Comisión.

Además, el documento revela que un 40 por ciento de los jóvenes que han salido al extranjero con el programa Erasmus desde que se creó en 1987 se instalaron en un país distinto al suyo en los años que siguieron a su graduación, de acuerdo a los datos reflejados, que trata de subrayar cómo este modelo potencia la movilidad profesional de los jóvenes en el continente.

La comisaria de Educación, Cultura, Multilingüismo y Juventud, la chipriota Androulla Vassiliou, celebró la publicación del informe porque «por primera vez hay pruebas» de las bondades del programa y de las mejores perspectivas de futuro que ofrece a los estudiantes que se acogen a él.

«El mensaje que nos deja es muy claro: Si estudias o te formas en el extranjero, tienes más probabilidades de mejorar tus opciones de encontrar un empleo», aseguró la dirigente tras recordar las cifras «inaceptables» de paro juvenil en la Unión Europea.

El estudio sobre el impacto del programa Erasmus, en el que han participado casi 80.000 personas entre becados y empresarios, indica también que un tercio de los estudiantes que se acogieron a esta beca para realizar prácticas en el extranjero recibieron después una oferta de empleo de la empresa en la que trabajaron.

Además, crece el espíritu emprendedor de quienes obtienen estas becas, ya que, según el informe, uno de cada 10 de los que regresan a su país lo hacen para crear su propio negocio.

Del lado del empresario, la percepción de los candidatos a los que emplear también mejora si en su currículo indican que han disfrutado una beca Erasmus. El 64 por ciento de los consultados aseguran que la experiencia internacional es «muy importante» y que asignan una mayor responsabilidad en la compañía a quien cuenta con dicho bagaje.

Cuatro millones. En la presentación del informe, la comisaria también prometió que el nuevo marco Erasmus para el período 2014-2020 dará apoyo a cuatro millones de personas, con disposiciones especiales para asegurar «más recursos» a los colectivos que más lo necesitan, como estudiantes sin recursos o discapacitados, si bien ha criticado los límites presupuestarios que imponen a esta iniciativa los Estados miembro.

El estudio ha tenido en cuenta otros factores de la experiencia vital de los antiguos alumnos y apunta que un 33 por ciento tiene una pareja estable de nacionalidad diferente a la propia, más del doble de la media de quienes no cursan parte de sus estudios en el extranjero (13 por ciento). Además, un 27 por ciento, conoció a su pareja, con lo que Bruselas estima que desde 1987 han nacido casi un millón de niños fruto de relaciones Erasmus.