El presidente en funciones, Mariano Rajoy, fue ayer a la reunión con el de C’s, Albert Rivera, en el Congreso con un documento de 18 páginas bajo el brazo, en el que bajo el título Cinco acuerdos para el consenso, el PP ofrece a Ciudadanos y PSOE un «proyecto de Gobierno para España» que marca unos objetivos, pero que está «abierto al diálogo». El presidente en funciones envió ese mismo paquete con propuestas al líder socialista, Pedro Sánchez, con el que se verá esta tarde en la Cámara Baja.

La reunión de hora y media de ayer fue «cordial», mostrando ambos su convicción de que los tres partidos constitucionalistas deben de alcanzar un acuerdo de Gobierno, algo que ayudaría a defender la unidad de España ante el desafío catalán, y a pedir flexibilidad a la UE en el objetivo de déficit. Sobre este punto, el dirigente popular señaló que el año pasado se había cerrado en el 4,5%, tres décimas por encima de lo exigido.

«Creo que coincidimos en muchas cosas, en la gran mayoría de cosas, porque lo que plantea el PP es de sentido común», destacó como balance de la cita el coruñés. El de Barcelona no fue tan allá pero sí reconoció que aunque estamos en «el tiempo de Sánchez» porque él es el candidato a la investidura, dejan una «puerta abierta» a Génova ya que hay unos «puntos en común». De hecho, los equipos negociadores de ambos partidos se verán en breve.

estabilidad. Tras ensalzarlas, el conservador sugirió la formación de un Gobierno «fuerte y estable», apoyado por 252 diputados, «libre de actitudes extremistas» que den al traste con la recuperación económica y que «no esté sujeto a hipotecas». Es más, señaló que la alternativa es «lo peor para España», el pacto entre el PSOE, Podemos e IU con el apoyo «activo o pasivo» de los independentistas. «Además de ser una ficción política, no serviría “ni para despejar incertidumbres ni para detener la amenaza separatista ni para ayudar a los parados, ya que el programa económico que ofrecen es propio del radicalismo antisistema», se puede leer en el texto redactado por Génova.

Por eso, la oferta del Partido Popular pasa por cinco «grandes pactos» de Estado. El primero es por el Crecimiento y el Empleo, que busca «asegurar la consolidación de la recuperación económica». Aquí Mariano Rajoy introdujo una novedad. Está de acuerdo con Ciudadanos en pedir a la UE «flexibilidad» en el objetivo de déficit de España, como «permite la normativa europea».

«Ya lo hice», recordó el presidente en funciones del Ejecutivo central al mostrarse «absolutamente convencido» de que encontraría la comprensión de Bruselas siempre que se traslade el mensaje «claro y nítido» de que España quiere cumplir, lo cual supondría, aunque no lo dijera expresamente, la gran coalición. En este sentido, Albert Rivera celebró con cierto entusiasmo esta posición del conservador porque, de esta forma, se permitirá hacer reformas «pero sin necesidad de recortes y subidas de impuestos».

El segundo Pacto de Estado es el de la Reforma Fiscal y la Financiación. Se trata de garantizar la sostenibilidad de las políticas públicas y revisar el sistema de financiación autonómica, de tal forma que se garantice un «nivel mínimo» de servicios en todos los territorios, así como una «cartera común» en sanidad, educación y servicios sociales.

El Pacto Social es el tercero de los acuerdos que propone Génova, que busca reforzar «los pilares básicos» del Estado del Bienestar, garantizar las pensiones y «poner el foco» en los ciudadanos que están en una situación de «mayor vulnerabilidad».

El cuarto punto que contempla el documento es el de Educación -en las últimas semanas, los populares se habían manifestado a favor de reformar la Lomce-, en el que se incluye un «acuerdo sobre la ciencia en España».

Por último, el informe plantea un Pacto para el Fortalecimiento Institucional, que incluiría un compromiso con el proyecto europeo para avanzar en la integración económica y política; la unión de los demócratas contra el terrorismo; ahondar en la reforma de las administraciones públicas y luchar contra el fraude fiscal . Además, aboga por la defensa de la unidad de España y la soberanía de su pueblo. En este punto, Rivera manifestó que para C’s es condición innegociable que en cualquier acuerdo que pueda alcanzar contemple «expresamente» que no se van a celebrar consultas independentistas. Un punto que defienden, dijo, «Ciudadanos, el PP y espero que el PSOE».

Respecto a la corrupción, Rajoy aseguró que los últimos casos no afectan «en nada» a sus posibilidades de ser investido y que si bien el Gobierno ya ha tomado «muchas decisiones» para luchar contra esta lacra, está dispuesto a escuchar propuestas. Y es que para Rivera es un asunto prioritario en el que, a su juicio, el PP no ha hecho lo suficiente. Por eso el líder de C’s plantea un Pacto Nacional por la transparencia y contra la corrupción que, advirtió, es «fundamental» para alcanzar cualquier acuerdo.