Las reforma de la ley electoral es uno de los temas pendientes para este periodo de sesiones en las Cortes de Castilla-La Mancha. El compromiso socialista es el de sacar adelante esta reforma o, por lo menos, iniciar el camino hacia ella. Todo dependerá de lo ambicioso que quiera ser el Gobierno -y Podemos- en este sentido. No hay que olvidar que la última modificación del Estatuto de Autonomía la pasada legislatura limita, y mucho, el margen de acción, al reducir en cerca de una veintena el margen de escaños posibles. A día de hoy, el parlamento regional no puede tener más de 35 diputados.
Otra vía para cambiar la Ley Electoral sería abrir la puerta al distrito único para Castilla-La Mancha, frente al tradicional distrito provincial, aunque también habría que modificar el Estatuto, porque blinda la circunscripción provincial. Se trata de una inicitiva que, incluso matizada por la Ley D’Hont, favorece la representatividad (se acerca al objetivo un hombre, un voto) y que el presidente regional, Emiliano García-Page, no vio con malos ojos, eso sí, cuando estaba en la oposición.
Tomando como base los resultados de las últimas elecciones autonómicas, el distrito único electoral abriría la puerta de las Cortes castellano-manchegas a Ciudadanos (que se quedó al borde de obtener representación en los pasados comicios) y permitiría la vuelta de IU, fuera del parlamento regional desde los noventa. Un nuevo escenario político que se lograría tanto llevando al límite el tope estatutario (35 diputados)como dejando la ley con los 33 actuales. Es más, la formación que todavía lidera Cayo Lara se convertiría en la llave del Gobierno, rompiendo el doble empate ente PSOE y PPy Ciudadanos y Podemos.
Aun así, no hay que olvidar que reformar el Estatuto de Autonomía se antoja en estos momentos difícil, sobre todo si no se cuenta con el apoyo del Partido Popular. Toda reforma estatutaria precisa del apoyo del Congreso de los Diputados y del Senado, algo complicado hasta que no se clarifique el panorama político nacional, e imposible sin el PPen el Senado, donde los ‘populares’ tienen mayoría absoluta.
Desde Podemos se plantea abrir el debate y traer a las Cortes expertos en la materia para que expliquen sus alternativas. Y aunque quieren el máximo acuerdo posible, el desmarque del PP no sería obstáculo para sacar adelante con el PSOEuna reforma electoral, como ya ha comentado en alguna ocasión el secretario general de la formación morada en la región, José García Molina. No obstante, como ya avanzó este otoño, 33 no es su cifra ideal de escaños. Como recuerda, con este sistema «Ciudadanos quedó fuera con 90.000 votos y el PP con algo más de 400.000 tiene 16 diputados».
En principio, Podemos defiende un sistema de elección por provincias pero más proporcional. Estiman que para que una provincia sea realmente representativa deben contar con al menos diez escaños. Esto llevaría a un Parlamento de 51 ó más, pues alguna de las provincias debe de ser impar para poder desempatar si se diera el caso.