El exportavoz del Gobierno de Cospedal, Leandro Esteban, declaró ayer ante el juez a cuenta de una demanda civil interpuesta en su contra por el Taller de Arquitectos Sánchez Horneros (TASH) por vulneración del derecho al honor. En concreto, por sus críticas a una posible paralización judicial de las obras del Hospital de Toledo, hechas el 19 de febrero de 2015, cuando todavía formaba parte del Ejecutivo regional.
EL quid de la cuestión está en lo que dijo Esteban ese día en rueda de prensa. Según recogió entonces La Tribuna, el portavoz de la Junta confesó no comprender «cómo hay personas con tan mala entraña», capaces de entorpecer la construcción de un hospital «tan necesario para los toledanos». Unas palabras con las que quería responder a la interposición esos días de un recurso contra la readjudicación de las obras del Hospital de Toledo, si bien no especificó entonces si se refería al recurso puesto por TASH, como dirección facultativa del proyecto original, o el presentado también en ese periodo de tiempo por el PSOE. En su declaración ayer ante el juez, Esteban explicó que siempre se refirió al recurso presentado por el PSOE (no al de TASH) y que sus declaraciones se enmarcaban dentro del enfrentamiento político, máxime en unas fechas como aquellas, en «plena precampaña» de las autonómicas.
En este sentido, insistió en que en ninguna de sus intervenciones públicas como portavoz del Gobierno hizo alusión directa al citado estudio de arquitectura, ni entonces ni en ocasiones anteriores.
Y es que la acusación insistió en el hecho de que Esteban ya había criticado antes el proyecto del hospital toledano, al que calificaba de «faraónico» y «esperpéntico». Una acusación que también exige a Esteban la retractación pública de sus palabras.
Al respecto, Esteban contestó que estas críticas no iban dirigidas al proyecto en sí, «que seguramente sea de premio de arquitectura», sino ante la insistencia del Ejecutivo de entonces -del PSOE- en llevar a cabo una obra cuyo coste no podía asumir.
Por su parte, la defensa de Esteban, además de justificar las palabras del exportavoz como críticas hacía el PSOEdentro del normal juego político, defendió que «mala entraña» no supone en sí una injuria. Tirando de diccionario, recordó que esta locución equivale a «mala fe» y que no puede ser considerada como ofensiva. Por ello entiende que la demanda tiene que ser desestimada.
Por su parte, el Ministerio Fiscal se suma a los argumentos de que las críticas iban dirigidas hacia el PSOEy también entiende que la demanda contra Esteban tiene que ser desestimada. El juicio ha quedado visto para sentencia.