Apovata pide una bajada de la carga impositiva para reactivar la economía local

J. L. M. / Talavera
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La Asociación de Afectados por la Ponencia de Valores entregó ayer en el Ayuntamiento un informe con 110 propuestas

Representantes de Apovata entregan ayer en el registro de Urbanismo del Ayuntamiento sus propuestas. - Foto: Peña

La Asociación de Afectados por la Ponencia de Valores (Apovata) presentó ayer en el registro de Urbanismo del Ayuntamiento un total de 110 peticiones informativas para que desde el equipo de Gobierno municipal les aclaren las posibilidades de desarrollo de aquellas zonas declaras en estos momentos urbanizables. En declaraciones a los medios, el presidente de Apovata, Víctor Jiménez, señaló que lo que tiene que hacer el Consistorio es dar cuenta exacta de las opciones para construir en un sector y del tiempo en el que se puede efectuar la edificación. «Si me dicen que tienen que pasar cincuenta años, eso está fuera de la ley y no me pueden estar gravando ese tiempo por una opción urbanística que no puedo ejecutar», subrayó.  

En relación con este punto, Jiménez comentó que la mala situación económica y empresarial de la ciudad se debe en gran parte a las excesivas cargas fiscales que han de soportar las familias, los autónomos y las empresas. «Talavera está parada y hay que moverla desde la permisividad, quitando las trabas que se ponen a cualquier movimiento y desde liberar recursos vía reducción de impuestos», manifestó al respecto el responsable del referido colectivo, quien además aseveró que, aunque el Ayuntamiento ha cumplido con la legislación en lo que se refiere a fiscalidad, «podría haber hecho algo más».

Así, apuntó que podría haber subvencionado hasta en un noventa por ciento los terrenos urbanizables en vez de entre un quince y un setenta y cinco por ciento y, al mismo tiempo, podría haber concedido bonificaciones  de un cinco por ciento a las familias que domicilien el pago del Impuesto de Bienes Inmuebles, una medida esta que, según explicó, sí se aplica en Madrid. Precisamente, Víctor Jiménez se refirió a la capital de España como ejemplo de ciudad en el que el nivel impositivo es bastante más bajo que el de Talavera y, por tanto, las empresas y los ciudadanos tienen un margen de maniobra mucho más amplio.

A juicio del presidente de Apovata, la reactivación de la economía talaverana pasa disminuir el actual gravamen fiscal. «Si las familias, autónomos y empresas están muy gravadas por la fiscalidad, no tienen recursos para ponerse en marcha, no tienen ganas de venir», comentó. Igualmente, aconsejó a las diferentes administraciones centrarse más en favorecer la creación de empleo que en crear puestos de trabajo por sí mismas, debido a que, desde su punto de vista son los tres agentes citados anteriormente los que deben asumir esa responsabilidad, aunque apostilló que para ello precisan de unos recursos económicos que han de venir de una menor carga fiscal.