Los vecinos proponen el traslado del geriátrico al 'Virgen de la Salud'

e. martín | TOLEDO
-

El presidente de la asociación de Palomarejos expuso a Tolón la preocupación por el futuro de estas instalaciones cuando se abra el nuevo hospital y lo que esto supondría para el comercio aledaño

La alcaldesa de Toledo, Milagros Tolón, se reunió en la tarde del jueves con el presidente de la asociación de vecinos ‘La voz del barrio’ de Palomarejos, Guillermo Escolante,  que expuso las deficiencias de una zona en la que a día de hoy preocupa el uso que se le vaya a dar al edificio del ‘Virgen de la Salud’ cuando se abra en Santa María de Benquerencia el nuevo hospital de Toledo. Tolón visitó los espacios que el colectivo ve más deteriorados y recalcó el compromiso de su equipo de Gobierno en mantener un contacto constante con los directivos de las asociaciones de vecinos para conocer de primera mano cuáles son las demandas y necesidades de los barrios toledanos. «Vamos a estar en la calle para escuchar a los vecinos y atender sus necesidades y vamos a afrontar las dificultades con el mayor consenso posible», dijo Tolón, que estuvo acompañada por el concejal de Movilidad, Juan José Pérez del Pino.

Escolante expuso a la alcaldesa la situación de las dos pistas polideportivas del barrio y pidió la instalación de vallado y la implantación de horarios de uso para evitar el botellón y «los escándalos nocturnos». Entre las cuestiones que también comentaron a la alcaldesa se encuentra el arreglo de un tragaluz del centro cívico que está estropeado desde hace siete meses. «Cuando llueve los pasillos de las dependencias se llenan de agua», explicó el presidente vecinal, que recordó cómo en su momento se arreglaron algunas de las humedades que salieron en el edificio por parte de la escuela taller. Cerca del centro cívico, también pidieron el arreglo de una zona terriza en la que las raíces de un árbol han levantado parte de la entrada a estas dependencias.

En esta visita a Palomarejos el colectivo vecinal también mostró su inquietud por ver qué pasa con la restauración del barrio de Corea y los permisos para instalar ascensores en algunas de estas viviendas, la mayor parte habitadas por población de avanzada edad. El equipo de Gobierno, como explicó a este diario Escolante, quiere ver con detenimiento los estudios elaborados en la Universidad de Castilla-La Mancha al respecto.

Sin embargo, «primordial» es para Palomarejos el uso del hospital. «Si se cierra completamente se va a hundir toda la economía del barrio», explicó Escolante, quien puso sobre la mesa algunas opciones como trasladar a la avenida de Barber los servicios que ahora se prestan en el hospital del Valle. «Está lejos, no hay buena combinación de transporte y se trata de un hospital geriátrico, por lo que mejor sería trasladarlo aquí».  A los vecinos les gustaría que este asunto quedara resuelto antes de que cierre el ‘Virgen de Salud’ y antes, apunta, «de que los negocios se vengan abajo con la crisis que tenemos encima».