Unos 200 vecinos recorren entre ayer y hoy todos los domicilios de Consuegra para recaudar fondos. Los consaburenses esperan impacientes a las puertas de sus casas el paso de la galera, una tradición de 253 años. Durante meses, han guardado monedas para depositarlas en las talegas de los peticionarios. Lo recaudado se destina al mantenimiento de la ermita.